Rafael Castelán Martínez, presidente de Servicios de Inclusión Integral y Derechos Humanos AC (Seiinac), manifestó que urge el regreso a clases presenciales del alumnado; sin embargo, autoridades educativas no garantizan las condiciones para un retorno seguro.
En entrevista con Criterio, el activista puntualizó que a más de un año de la suspensión de actividades, las infancias muestran estrés, ansiedad, tristeza, frustración y desesperación”.
Además, en algunos casos no reciben apoyo docente, ni de madres o padres de familia, lo que deriva en afectaciones en el proceso de aprendizaje. Otro de los factores es que los “niños entregan sus tareas porque el sistema educativo así lo demanda”, pero no están adquiriendo los conocimientos necesarios”,
Aseguró que la organización tiene un proyecto en el que ayudan a a los alumnos con sus tareas, pero reconoció que “hay niñas y niños que pasaron a tercero de primaria y no tienen la preparación para desarrollar una oración o leer un párrafo”.
El activista se cuestionó qué “va a pasar con ellos cuando regresen a clases (presenciales), las deficiencias son altas que seguramente los maestros no tendrán las estrategias para atenderlas”.
Al plano educativo se suman las violencias en casa, desde la sexual hasta la física; aunque en otros casos los infantes dejaron de lado sus estudios para trabajar o incluso “fueron alcanzados por el crimen organizado”.
No obstante, dijo que es necesario que los planteles cuenten con agua, jabón, filtros sanitarios y demás medidas de higiene para evitar contagios de Covid-19 y asegurar un retorno seguro.
Adela Garmez I Pachuca
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