Los agresores de Zeús, el lomito de La Calera, enfrentan cargos por delitos contra la integridad animal. Su situación legal será decidida en los próximos días
Zeús fue trasladado al hospital veterinario Petterra tras sufrir graves lesiones en el ataque
Este miércoles, comparecieron ante la justicia Pablo, Alan y Michel, los tres hombres acusados de haber agredido con un martillo a Zeús, el lomito que sufrió el ataque el pasado 22 de junio en la colonia La Calera, Mineral de la Reforma. El caso ha generado gran indignación entre los vecinos y grupos protectores de animales, quienes exigen justicia para el lomito afectado.
Los acusados fueron notificados formalmente de las denuncias en su contra el miércoles 18 de septiembre, momento en el cual se llevó a cabo la audiencia inicial en los juzgados penales de Pachuca, bajo la supervisión de la jueza Karina Vertiz Marín.
En dicha audiencia, los imputados solicitaron acogerse al plazo constitucional de 144 horas, tiempo en el cual se definirá su situación legal.
Durante este período, los agresores permanecerán bajo vigilancia judicial. Esta medida ha sido adoptada debido a las denuncias de amenazas que han recibido los vecinos de La Calera, quienes señalaron haber sido intimidados por los acusados.
Las autoridades implementarán un seguimiento telefónico para asegurar que los imputados cumplan con las restricciones impuestas por el tribunal.
El ataque contra Zeús, calificado como un acto brutal, se dio luego de que el perro se escapara de su hogar y comenzara a ladrar a otros canes en la zona. Según testigos, los tres acusados lo sujetaron del collar y lo golpearon reiteradamente con un martillo, lo que desató la furia de los habitantes del lugar.
El tutor de Zeús llegó al lugar justo en el momento en que el lomito era atacado, alertado por una llamada telefónica. Pese a los esfuerzos por detener la agresión, los golpes continuaron hasta que la presencia de varios vecinos forzó a uno de los agresores a liberar al perro, quien resultó gravemente herido.
Uno de los atacantes, en tono desafiante, le dijo a su dueño: “Ya entra por tu chingadera“, antes de abrir la puerta y dejar salir al animal.
Tras el ataque, Zeús fue llevado de urgencia a un veterinario, donde su estado de salud seguía siendo crítico. Aunque en un primer momento se le administraron desinflamantes y se le tomó una placa, el perro continuaba desorientado, por lo que fue trasladado al hospital veterinario Petterra para un tratamiento más especializado.
La organización La Jauría de Balú ha seguido de cerca el caso, alertando sobre el peligro inminente que aún enfrenta la vida de Zeús.
La audiencia inicial ha generado gran expectativa, ya que la jueza decidirá en los próximos días si los tres acusados serán vinculados a proceso.
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