Hilda Olaya Tadeo, ciudadana de Tizayuca, acusó que sus dos hijos, quienes son personas con discapacidad (PCD), estuvieron a punto de ser linchados por vecinos del fraccionamiento Rancho Don Antonio, Quma, tras haber sido acusados de presuntamente sustraer mercancía de un minisúper.
En entrevista con Criterio, la afectada señaló que, el domingo de la semana pasada, sus dos consanguíneos compraron un refresco en el establecimiento, ubicado en la primera sección, y al salir fueron agredidos por una multitud de aproximadamente 20 personas, convocadas por el dueño del negocio, quien supuestamente no se percató que su dinero estaba en el mostrador: “Causó una terrible confusión”.
Argumentó que tras la golpiza, Zuriel Isaí, de 22 años, quien padece epilepsia psicomotora y retraso mental y Luis Felipe, de 18 años, con retraso mental, y lento aprendizaje, fueron trasladados al Ministerio Público (MP) local. “Llegaron golpeados y el policía me dijo que los salvaron de ser linchados. Finalmente, el dueño del negocio no presentó ningún cargo y firmé un convenio de perdón, pero quiero justicia para mis hijos”, dijo.
Detalló que por la agresión los jóvenes tienen secuelas físicas y temen salir a la calle, tras considerar injusta la represalia en su contra. Añadió que actualmente mantiene un proceso en la oficina local de derechos humanos para que el caso no quede impune y pueda ser abordado por autoridades de los tres niveles de gobierno.
Asimismo, reconoció que tiene la incertidumbre de que haya represalias físicas contra su persona y la de sus hijos por hacer mediático el asunto.
Seguirá proceso legal por abuso
Zuriel Isaí, de 22 años, quien padece epilepsia psicomotora y retraso mental, y Luis Felipe, de 18 años, con retraso mental y lento aprendizaje, fueron golpeados por vecinos del fraccionamiento Rancho Don Antonio Quma
La denunciante, madre de los jóvenes, indicó que seguirá el proceso legal para exigir justicia ante el presunto abuso contra sus hijos
Alfonso Marín I Tizayuca
