Los parquímetros instalados en el primer cuadro de la ciudad han sido objeto de actos vandálicos y sabotajes a través de pintas, pegamento para atrofiar la maquinaria y explosión de petardos. 

Miguel Ángel Gutiérrez Toledo, encargado del programa MoviParq, informó que desde noviembre de 2015 –mes en que se instalaron los aparatos– han sido dañados 15 dispositivos de cobro.
El ataque más “álgido” se perpetró a principio de 2016, cuando desconocidos lanzaron un petardo a un parquímetro, lo que dañó la carcasa del aparato electrónico, indicó Gutiérrez Toledo en entrevista con Criterio.

“Internamente no fue dañado, lo único que sí se afectó fue la tapa del parquímetro, que se dobló y tuvo que ser cambiada.
“No supimos a ciencia cierta quién o quiénes fueron las personas que cometieron este acto vandálico”, indicó.

Otros dispositivos fueron dañados al introducirles pegamento blanco en estado líquido en la rendija donde reciben las monedas, así como espuma o monedas con adhesivo industrial. La última transgresión a estos aparatos electrónicos, sostuvo, son las pintas.

El encargado de MoviParq dio a conocer que no se han presentado robos de las cajas que almacenan el dinero que los usuarios introducen en las máquinas, ya que cuentan con un dispositivo que alerta al Centro de Comando y Comunicación (C-2) de la policía capitalina en caso de intentos de hurto.

La instalación de este programa en calles céntricas como Vicente Guerrero, Cuauhtémoc, Cobarrubias, Miguel Hidalgo y Morelos, el cual –según autoridades– tiene como objetivo agilizar la movilidad vehicular, provocó la inconformidad de automovilistas y comerciantes, quienes, recriminaron, ahora pagan por el uso de la vía pública.

La presidenta electa Yolanda Tellería Beltrán dijo que, en su momento, revisará el contrato para decidir el futuro de estos aparatos concesionados.