Durante la pandemia sanitaria por Covid-19 —cuyo brote inició el 19 de marzo pasado en el estado—, la Comisión Nacional de Derechos Huma-nos (CNDH) confirmó que se han registrado seis decesos de presos que contrajeron la cepa viral en el interior de los Centros de Readaptación Social (Cereso) de Hidalgo.
De acuerdo con la actualización del Monitoreo Nacional por Covid-19 en centros penitenciarios, en el país hay 2 mil 674 casos confirmados de presos con la cepa del coronavirus, además de 234 decesos ocurridos en las penitenciarías y 215 sospechosos.
Sobre los Cereso de Hidalgo, además de los seis decesos, se tienen confirmados 56 contagios de la población penitenciaria.
El 2 de junio pasado en Hidalgo se detectaron los primeros casos de Covid-19 en una prisión de este tipo, en Tula de Allende, donde se hallaron seis positivos y un sospechoso.
Según el diagnóstico penitenciario de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo (CDHEH), en la entidad existe una población penitenciaria estimada de 4 mil 10 personas, recluidas en 16 prisiones.
De ellas, 3 mil 812 se encuentran en los 12 Cereso; 174, en tres cárceles distritales, y 24, en el Centro de Internamiento para Adolescentes.
En abril pasado, la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH) suspendió las visitas de familiares a presos que purgan condenas en los Cereso de la entidad para prevenir eventuales contagios de Covid-19.
Emmanuel Rincón | Pachuca