Estados Unidos y talibanes se reunieron el sábado en Doha, Qatar, reanudaron las decisivas conversaciones
para llegar a un acuerdo que permita la salida de la milicia estadunidense de Afganistán.
“Hemos hecho progresos y ahora estamos discutiendo el mecanismo de implementación y algunos aspectos técnicos”, dijo a la AFP Suhail Shaheen ayer, refiriéndose a las discusiones mantenidas dos días antes. “El acuerdo se completará tras pactar esos puntos”, agregó.
El segundo día de la novena ronda de diálogo estaba prevista para el viernes, pero ambos lados decidieron posponerlo al sábado, explicó.
Shaheen aseguró que cualquier pacto sería anunciado a la prensa, así como a los representantes de los países vecinos y a China, Rusia y Estados Unidos.
Estados Unidos, que invadió Afganistán y derrocó al gobierno talibán en 2001, desea retirar a miles de soldados que aún permanecen desplegados en el territorio, pero solo a cambio de que el grupo insurgente se comprometa a prohibir a las organizaciones terroristas operar en los territorios que controlan.
Washington espera llegar a un acuerdo con ellos para el 1 de septiembre, antes de las elecciones que deben celebrarse en Afganistán ese mismo mes y previamente a los comicios presidenciales de 2020 en Estados Unidos.
Ambos bandos negaron información difundida por los medios ayer, según las cuales se habría discutido crear un gobierno interino en Afganistán con presencia talibán.
“Tal y como el portavoz afgano declaró previamente, no hemos tenido discusiones sobre un gobierno interino”, tuiteó el enviado especial estadunidense para Afganistán Zalmay Khalilzad, aludiendo a otro mensaje en la misma red de Suhail Shaheen.
“Las decisiones de gobernanza deben tomarlas los afganos en negociaciones intra-afganas”, agregó Khalilzad.
Los talibanes reivindicaron ayer un ataque contra un convoy del ejército estadunidense que dejó como saldo
siete militares muertos cerca de la base aérea de Bagram, en el norte de Kabul, aún cuando el coronel Sonny Leggett, portavoz de las fuerzas estadunidenses en Afganistán, desmintió que se hubieran producido bajas tras
dicho atentado.
AFP I Washington