El gobierno de Francia decidió el sábado prolongar dos meses, hasta el 24 de julio, el estado de emergencia sanitaria en vigor para luchar contra la epidemia de COVID-19, anunció el ministro de Sanidad.
Activado el 24 de marzo, el estado de emergencia sanitaria se prorroga porque su levantamiento el 23 de mayo “sería prematuro”, “los riesgos de recuperación epidémica” están “probados en casos de interrupción repentina de las medidas en curso”, indica el proyecto de ley examinado el sábado en consejo de ministros y que debe ser sometido a partir del lunes en el Parlamento de Francia.
El texto precisa principalmente las condiciones de cuarentena impuestas a quienes lleguen a Francia y estén contagiados del virus.
Las personas infectadas deberán pasar catorce días en aislamiento, y en caso de rechazo serán sancionadas, con posibilidad de recurso ante la justicia
También señala la implementación de un “sistema de información” que atañe a los enfermos y su entorno durante un máximo de un año.
El objetivo es “reforzar el marco jurídico” y “ampliar[lo]” para “integrar los desafíos del desconfinamiento”, que debe comenzar el 11 de mayo, indicó el ministro de Sanidad, Olivier Véran, al término del consejo ministerial.
“Vamos a tener que vivir un tiempo con el virus”, recalcó.
“Aprender a vivir con el virus, esto es el desafío de los próximos meses”, reiteró el ministro del Interior, Christophe Castaner.
El nuevo coronavirus causó 24.760 muertos en Francia, 166 en las últimas 24 horas, según el último balance oficial comunicado el sábado.
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París, Francia | AFP