Russian Foreign Minister Sergei Lavrov attends a press conference following talks of representatives of the Arab League states with Russian Foreign Minister in Moscow on April 4, 2022. (Photo by Alexander Zemlianichenko / POOL / AFP)
El jefe de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, dijo este martes que las acusaciones de supuestas atrocidades cometidas por Rusia tras el hallazgo de cadáveres en Bucha son una “provocación” para hacer fracasar las negociaciones de paz entre Kiev y Moscú.
“Surge una pregunta: ¿de qué sirve esta provocación abierta y falaz?”, dijo Lavrov en un mensaje de video difundido en la televisión rusa, antes de responder: “Nos lleva a creer que sirve para torpedear las negociaciones de paz”.
Las negociaciones entre Rusia y Ucrania continúan. La semana pasada, tras una reunión en Estambul, Moscú anunció una reducción de sus actividades militares en el norte de Ucrania.
Kiev presentó en esas discusiones una serie de propuestas que incluyen un acuerdo internacional que garantice su seguridad.
A cambio, Ucrania aceptaría un estatus “no nuclear” y neutral, renunciaría a entrar en la OTAN y a autorizar bases militares extranjeras en su territorio. Moscú, en cambio, tendría que aceptar una eventual entrada de Ucrania en la Unión Europea.
Por el momento, el Kremlin no ha respondido oficialmente a estas propuestas.
Según Lavrov, la situación en Bucha pretende “desviar la atención del proceso de negociación, desviar la atención del hecho de que la parte ucraniana, tras Estambul, empezó a dar marcha atrás e intentó plantear nuevas condiciones”.
Las declaraciones de Lavrov responden a la indignación por el hallazgo de cadáveres en Bucha tras la retirada del ejército ruso. Kiev acusa a los soldados de haber masacrado a civiles. Moscú lo niega y afirma que se trata de un escenario plantado por las autoridades.
AFP | Moscú