Tres gasolineras del país, una de ellas ubicada en Tizayuca, Hidalgo, operaban con “rastrillos”, mediante los que robaban combustible a los consumidores.
Además, dichas estaciones de servicio no dejaron que la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) realizará acciones de verificación, a pesar de reportar “serías irregularidades”, informó el titular de la Profeco, Ricardo Sheffield Padilla.
En la conferencia matutina, el funcionario federal indicó que, en el caso de Hidalgo, se trata de una sucursal de Valero, con número permiso PL/1689/EXP/ES/2015, en la que, de 14 bombas despachadoras, ocho tenían rastrillo.
Sin embargo, el personal de la gasolinera obstruyó la labor del personal de la Profeco e impidió que se colocaran sellos de inmovilización.
Ante ello, Sheffield Padilla advirtió que se acudirá a dicha estación en Tizayuca con personal de la Fiscalía General de la República (FGR), pues ya no se trata de una irregularidad, “sino de un robo”.
Yuvenil Torres
Pachuca
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Durante los últimos seis años, el robo de combustible, los homicidios dolosos, los secuestros, las extorsiones y el narcomenudeo, es decir, los delitos de alto impacto, cobraron relevancia en Hidalgo, que tiene la mayor incidencia nacional del primer ilícito mencionado.
Según Petróleos Mexicanos (Pemex), el Instituto para la Gestión, Administración y Vinculación Municipal (Igavim) y Energy 21, al inicio de la pasada administración se detectaron 187 tomas clandestinas; sin embargo, en 2021, se hallaron 4 mil 489.
