El presidente estadunidense, Donald Trump, dijo que fue una “bendición” contagiarse de coronavirus por haber probado el medicamento regeneron, aunque admitió que la vacuna contra el coronavirus no estará disponible en Estados Unidos antes del día de la elección.

En un video publicado en Twitter, Trump afirmó que las farmacéuticas ya preparan miles de dosis y que está a punto de firmar una autorización para el medicamento. “Creo que fue una bendición haberme contagiado”, dijo el mandatario. “Fue una bendición encubierta porque me contagié, escuché sobre ese medicamento y dije ‘déjenme tomarlo’, fue mi sugerencia”.

“Creo que, si no me hubiera contagiado, estaríamos viendo esto como cualquier otro medicamento, pero hizo un trabajo fantástico. Quiero darles lo que me dieron a mí, y lo haré gratis”, señaló Trump.

En tanto, el mandatario admitió que la vacuna contra el coronavirus no estará lista para antes de la elección, como había prometido. “Vamos a tener una gran vacuna muy pronto. Me gustaría tenerla antes de la elección, pero ustedes saben que la política se mete en todo esto, y está bien, quieren jugar sus juegos, así que será después de la elección”, señaló Trump.

Por otro lado, el mandatario regresó ayer a trabajar a la Oficina Oval de la Casa Blanca, días después de salir del hospital por Covid-19 y rompiendo el aislamiento recomendado.

El vocero de la Casa Blanca, Brian Morgenstern, confirmó la información y dijo que el presidente había recibido un informe sobre el huracán Delta, que se prevé llegue a costas estadunidenses.

Debate no debería realizarse

El candidato demócrata a la Casa Blanca, Joe Biden, afirmó que el segundo debate electoral fijado para el 15 de octubre contra el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, no debería celebrarse si su rival republicano continúa dando positivo por coronavirus.

“Bueno, creo que, si todavía tiene coronavirus, no deberíamos tener un debate. Creo que tendremos que seguir pautas muy estrictas. Demasiadas personas se han infectado y es un problema muy serio”, dijo Biden.

En ese sentido, el candidato demócrata aseguró que, pese a “tener ganas de debatir”, se guiará por las pautas marcadas por los servicios médicos, quienes deberían tener la última palabra, y espera que “todos los protocolos sean respetados”.

Alejandro Montiel I Agencia Reforma