Durante una reunión con la Comisión de Salud del Congreso local, el secretario de la SSH, Marco Antonio Escamilla Acosta, expuso ante legisladores los retos y necesidades del rubro para el ejercicio fiscal 2020, como infraestructura, recursos humanos, medicamentos, programas y acciones preventivas en la materia.
El funcionario indicó que aún no se tiene definida la propuesta presupuestal por parte de la dependencia que encabeza, pues es necesario que se determine el “marco” de financiamiento a nivel federal.
“Nosotros tenemos proyectos y programas prioritarios, pero creo que la reunión fue con la finalidad de poder construir algo que sea genérico para la población en demanda de salud”, comentó.
Respecto de la conclusión y puesta en operación de hospitales construidos en administraciones anteriores, Escamilla Acosta señaló que está a la espera de que la Secretaría de Salud federal dé a conocer los lineamientos para el funcionamiento de nosocomios nuevos.
En Hidalgo, añadió, se pretende que comiencen a brindar servicio las clínicas de Zimapán, Metztitlán, así como la unidad neonatal, en Huichapan.
Solo para el hospital de Zimapán, externó, se requieren 57 millones de pesos y para el recinto de Huichapan, 19 millones.
Explicó que, previamente, el gobierno federal solicitó información sobre esas tres unidades médicas a la Secretaría de Salud de Hidalgo (SSH), por lo que, espera, se den a conocer los mecanismos bajo los que laborarán los nosocomios; es decir, si la nómina y la operación serán manejadas por la administración del país o bajo qué fuentes presupuestales funcionarán.
Yuvenil Torres l Pachuca