Rusia y Estados Unidos conmemoraron ayer un encuentro histórico entre las fuerzas soviéticas y estadunidenses durante la Segunda Guerra Mundial, en un ejemplo de cómo sus países pueden fomentar confianza y cooperar.

La reunión de las fuerzas armadas de ambos gobiernos en el río Elba el 25 de abril de 1945 está considerada como un hito de la Segunda Guerra Mundial, un presagio de la derrota de la Alemania nazi.

“El encuentro en dicho punto es un ejemplo de cómo nuestros países pueden dejar de lado sus diferencias, fomentar la confianza y cooperar en nombre de un objetivo común”, señaló un comunicado conjunto del presidente ruso, Vladimir Putin, y su homólogo estadunidense, Donald Trump, publicado por el Kremlin y por la Casa Blanca.

“Mientras hoy trabajamos para enfrentar los desafíos más importantes del siglo XXI, rendimos homenaje al valor y la valentía de quienes lucharon juntos para derrotar al fascismo”, añadió el comunicado.

“La heroica hazaña nunca será olvidada”, según el texto.

En un video publicado en Twitter, el embajador estadunidense en Rusia, Johan Sullivan, afirmó que el encuentro del Elba fue “un símbolo de lo que podemos conseguir cuando trabajamos juntos por una causa común”.

La reunión en el cuerpo de agua fue el “punto culminante de los esfuerzos colosales de muchos países y pueblos unidos, en el marco de la Declaración de las Naciones Unidas de 1942”, rememora el documento, al señalar que se trató de una lucha conjunta que costó la vida a millones de soldados y civiles en los teatros de operaciones militares.

Esta declaración tiene lugar en un momento en que las relaciones entre Washington y Moscú se encuentran en uno de los puntos más bajos después de la caída del muro de Berlín, en 1989, en medio de acusaciones mutuas y un distanciamiento cada vez mayor.

AFP | Moscú