Los negociadores de Gran Bretaña y la Unión Europea sobre el Brexit se reunieron este lunes, prometiendo ponerse a trabajar en una primera ronda completa de conversaciones sobre los términos del divorcio británico del bloque europeo.
“Tuvimos un buen comienzo el mes pasado, pero ahora estamos entrando en el fondo del asunto”, dijo el secretario británico del Brexit, David Davis, mientras era recibido por el negociador de la UE, Michel Barnier, en la Comisión Europea en Bruselas.
Tres grupos de trabajo se encargaron de tratar las cuestiones relativas a los derechos de los ciudadanos expatriados, la factura del Brexit y la gestión de la frontera entre Irlanda e Irlanda del Norte.
Se trata de los capítulos definidos como prioritarios para ambas partes, en los que la UE exige avances sustanciales como condición para empezar a abordar su relación futura con GB.
El tema más difícil es la factura que Bruselas pretende cobrar a los británicos por los compromisos financieros adquiridos anteriormente.