La Oficina del Representante Comercial de Estados Unidos (USTR) pidió a México revisar la presunta denegación de derechos sindicales a trabajadores de General Motors (GM) en Silao, Guanajuato.

Esta petición, realizada a las Secretarías de Economía y del Trabajo, se da al amparo del T-MEC y supone el uso del mecanismo de respuesta rápida, indicó la USTR en un comunicado.

“Es la primera vez que un país utiliza el mecanismo laboral de respuesta rápida en el T-MEC.

“La USTR y el Departamento del Trabajo recibieron información que parece indicar graves violaciones a los derechos de trabajadores en Silao sobre una votación organizada por el sindicato para aprobar el contrato colectivo”, afirmó.

La solicitud fue presentada con base en el artículo 31-A.4.2 del T-MEC. El acuerdo incluye el mecanismo de respuesta rápida para solucionar controversias sobre libertad sindical y negociación colectiva.

Este consiste en una notificación a la autoridad del país donde está la empresa señalada y el inicio de una investigación.

Si la respuesta no se considera favorable, se activa un panel de solución de controversias, que prevé sanciones con aranceles y bloqueo de importaciones.

El plazo para desahogar todo el proceso lleva hasta cuatro meses.

Economía informó, una vez que recibió la petición de EU, inició la revisión del caso.

Si confirma irregularidades, compartirá los resultados y una propuesta de reparación.

EU creó una estructura gubernamental para dar seguimiento a la aplicación del T-MEC en materia laboral, pues en las negociaciones argumentó que en México hay condiciones precarias, sin verdadera representación sindical, lo que genera comercio desigual y perjuicio a sus empresas.

México se comprometió a respetar los derechos laborales, por lo que sindicatos y los contratos deben pasar por un proceso de legitimación.

El mecanismo se activó ante una denuncia presentada al Congreso estadunidense reporta varias anomalías sobre la legitimación del contrato colectivo entre la planta de GM en Silao y el sindicato Miguel Trujillo López, afiliado a la CTM.

Entre las irregularidades están que el tiempo para votar de 6 mil trabajadores fue insuficiente; el sindicato no entregó copia del contrato colectivo, destrucción de votos y sustitución por sufragios a favor, negar boletas a las autoridades laborales y ejercer amenazas e intimidación para ganar adeptos.

La Secretaría del Trabajo ordenó reponer el proceso de votación en 30 días.

En tanto, GM descartó ser parte de las presuntas violaciones.

“No consideramos que haya involucramiento de General Motors en las presuntas violaciones ocurridas en nuestro complejo de Silao.

“Hemos contratado a un consultor externo para realizar una revisión independiente y exhaustiva”, expuso en un comunicado.

Verónica Gascón I Agencia Reforma