El sector educativo del gobierno federal trabaja a marchas forzadas para enfrentar el comienzo del ciclo escolar por televisión.
A dos semanas del inicio de clases, el Canal Once del Instituto Politécnico Nacional (IPN), convocó a licitación para contratar el servicio integral de producción y postproducción de programas para el proyecto que denominó Telescuela para Todos, continuación de Aprende en Casa, anunciado el 3 de agosto por la Secretaría de Educación Pública (SEP).
La SEP había contratado el 18 de junio a dos empresas, por 36 millones de pesos, para producir hasta el cierre de año cápsulas y programas de Aprende en Casa y otros materiales de la Dirección General de Televisión Educativa, pero eso fue antes de decidir que toda la educación básica iniciará el ciclo por televisión ante la pandemia.
Por la urgencia, el director general del IPN, Mario Rodríguez Casas, publicó el 10 de agosto un acuerdo para que Canal Once pueda realizar trámites de la licitación en días y horas inhábiles. Dicho concurso público es tal vez la más grande que ha hecho el canal. Comprende 16 partidas con todos los servicios de producción, incluidos traslados, maquillaje, vestuario, montaje de escenografías para imitar un salón de clases, trabajo en locación y provisión de todos los equipos de postproducción.
La empresa ganadora del contrato, que será anunciada el 24 de agosto, tendrá que proveer servicio diario de café para entre 944 y 2 mil 360 personas y hasta 2 mil 240 traslados semanales, y deberá contar con dos foros propios para producción, además de usar las cabinas propias del canal.
“El proveedor deberá contar con el personal mínimo necesario para satisfacer hasta tres llamados de ocho horas diarios, por hasta seis días a la semana”, advirtió el IPN.
Dicho personal sería de alrededor de 150 técnicos, entre jefes de piso y de estudio, camarógrafos, asistentes, operadores, iluminadores, ingenieros y postproductores, ya que se están solicitando turnos continuos de ocho horas cada uno.
La licitación no incluye contenidos; es decir, solo es para los aspectos técnicos de la producción, y las empresas interesadas solo tendrán diez días entre la publicación de la convocatoria y la presentación de sus ofertas.
Cabe recordar que todas las concesionarias de televisión abierta aceptaron ceder tiempos para la transmisión de estos programas, pero la producción de los contenidos corre a cargo del gobierno.
Víctor Fuentes I Agencia Reforma
