Luego del desbordamiento del río Tula y las inundaciones derivadas en diversas regiones del estado, el expresidente del Colegio de Ingenieros Civiles del Estado de Hidalgo, Rubén Pérez Ángeles, afirmó que existen opciones para evitar este fenómeno natural, como la ampliación y elevación de este cuerpo de agua.

El especialista reconoció que una limitante para llevar a cabo acciones de ese tipo sería la cuestión presupuestal o incluso de voluntad política; asimismo, recordó que hace algunos años ambientalistas de la región se opusieron a un proyecto de ampliación del río, al argumentar que se iban a derribar árboles.

“Yo creo que, si esa obra se hubiera podido aterrizar, como se tenía planeado, esto (la inundación) se pudo haber evitado. Sí, había que quitar árboles en las orillas, pero la intención era proteger a la población y permitir que el agua, si llegaba a bajar, pasara sin ningún problema”, explicó.

Asimismo, destacó que la falta de planeación y de infraestructura, así como de ordenamiento territorial, abonan a la situación de susceptibilidad en que se encuentra la región Tula.

Todos los ayuntamientos, remarcó, deben contar con cinco instrumentos básicos de planeación: Atlas de Riesgo, plan de desarrollo urbano, plan ordenamiento territorial, reglamento de construcción y perfil de resiliencia, a fin de identificar en dónde se puede construir y en donde no, para evitar tragedias como la ocurrida en Tula de Allende.

“Si no se tienen estos instrumentos, estamos construyendo y creciendo a criterio, ya no digo a que a ciegas, pero sí a criterio de quien está en turno y evaluando las licencias de construcción y ahí es donde están los resultados”, acotó.

Agregó que el río Tula no cuenta con capacidad para recibir o desaguar la cantidad de líquido que ha caído en los últimos días.

Yuvenil Torres | Pachuca

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