Se dice… que el alcalde de Tlanchinol, el panista Marcos Bautista, a casi la mitad de su administración, ha perdido el control de sus colaboradores quienes hacen lo que quieren al pasarse la mayor parte del tiempo metidos en la fiesta y dejando de lado sus obligaciones laborales con la complacencia del presidente municipal, quien también anda en el mismo tenor.
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Se dice…que la síndica jurídica de Pachuca, Mariana Santiago Juárez, tiene la consigna de ser incisiva en las sesiones de Cabildo como su compañera Liliana Mera, pero la aventaron al ruedo sin armas, pues a la mera hora le dicen qué decir y ante las respuestas de los regidores solo se queda callada, incluso, ayer ella preguntó sobre la firma de un convenio de colaboración con la Semarnath y el regidor Oscar Pérez le dijo que este se iría a la Comisión de Hacienda; sin embargo, ya se había votado por la dispensa para que fuera aprobado en la sesión, situación que nunca intentó refutar la síndica.
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Se dice…que hablando del cabildo, la morenista Liliana Mera dejó la orden de no permitir que su suplente ocupe su oficina en Casa Rule, pues se adueñó de ella y, aunque pidió licencia, no sacó sus cosas, y aseguró que solo se saldrá de ella cuando Julio Menchaca le ofrezca algún puesto dentro de su gabinete; en ese sentido, le advirtió a su personal que cuando regrese no quiere ver ni un lápiz movido, ya que de lo contrario despedirá a quien lo haya permitido. Ya veremos si le ofrecen un puesto o se queda con las manos vacías.
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Se dice…que por andar distraída y saliéndose de la sesión, a la diputada Michelle Calderón se le pasó su turno de pasar a dar su postura en un acuerdo económico presentado por legisladores de Morena, relacionado con la desaparición de personas e identificación de cadáveres, y subió a tribuna en otro punto que ya no tenía que ver con el tema, violentando el orden del día, motivo por el cual el presidente de la mesa directiva le llamó la atención y le pidió apegarse al asunto en turno.
