Frente a niños y padres de familia que visitaban el Tuzoofari, ubicado en Epazoyucan, un león devoró a una sus crías que acababa de ser parida.
El incidente fue denunciado por la presidenta de la Fundación Invictus, Erick Ortigoza Vázquez, quien criticó que lo ocurrido evidencía las carencias y ausencia de protocolos para la reproducción de esta especie en dicho espacio de cautiverio animal.
La presidenta de la Fundación Invictus facilitó a Criterio uno de los vídeos del incidente, el cual fue grabado por visitantes que acudieron al sitio en compañía de menores.
En el que vídeo, de cerca de un minuto de duración, los asistentes creían que el león acudía a conocer a su cría, sin imaginar que lo haría.
La activista precisó que en su hábitat los leones tienen este tipo de conductas de devorar a las crías, cuando son hijos de otra manada o cuando el rey o patriarca se sienta agobiado.
“Por eso nacen aislados. Se va la leona con dos tres más, aislada, para salvaguardar de cualquier intruso a su especie”.
En cautiverio, explicó, cualquier lugar serio tiene un área de maternidad, con circuito cerrado, para monitorear a la hembra, o disponen de un cuarto de noche donde se le aísla para garantizar la reproducción de la especie, permitir su crecimiento y, posteriormente, integrarlo con el resto del grupo.
Señaló que el periodo promedio de gestación de una leona es de tres a tres meses y medio. Por ello, añadió, la hembra debió ser monitoreada y aislada desde una semana antes de cumplir los tres meses, en un ambiente controlado, lo que no ocurrió.
La ambientalista añadió que estas medidas, entre otras, están contempladas en los lineamientos del programa de Conservación de la Ley federal de Vida Silvestre, que debieron presentar ante la Semarnat para contemplar el sitio como un espacio de reproducción animal.
Por tal motivo, pidió que el Tuzoofari “sea inspeccionado. Que se sancione por lo cometido, porque ningún programa de manejo autorizado por la dirección general de vida silvestre puede omitir medidas de bioseguridad, máxime si tienen reproducción”.
Ortigoza Vázquez lamentó además que hubo visitantes que lo presenciaron, pero, añadió, queda la impresión que probablemente se hayan reportado otros casos de los que no hay registro.
“A veces no se sanciona con lo debido. No es solo que paguen una multita, sino que metan esas medidas correctivas… que se les sancione económicamente… que se les sancione cerrando ese espacio”.
Redacción
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