Este mes vence el préstamo del chileno Víctor Dávila con León, equipo con el que recuperó su brillo y fue uno de los hombres determinantes de Ariel Holan, en la pasada liguilla del Grita México A21.
Luego de dos complicados años en la Bella Airosa, donde sufrió una fractura de peroné en sus primeros meses como tuzo, la directiva del Pachuca optó por enviarlo al Bajío, confirmándose el traspaso el 18 de diciembre de 2020.
Las cosas cambiaron con la Fiera, pues el andino se convirtió rápidamente en un inamovible, cerrando este 2021 con 39 encuentros de Liga MX disputados, de los cuales en 31 fue titular, así como 2 mil 601 minutos en la cancha, 14 goles anotados y dos asistencias.
Dávila duplicó su productividad en estos 12 meses, pues en cuatro torneos con los Tuzos apenas sumó 47 encuentros –entre su lesión y la pandemia–, con solo siete tantos logrados; incluso, su último duelo como elemento blanquiazul quedó marcado por las tres fallas inverosímiles, frente al arco de Pumas, en la ida de los cuartos de final del Guard1anes 2020.
Dávila llegó a la capital hidalguense hace tres años, en movimiento en el que la directiva tuza desembolsó 12 millones de dólares, que lo convierten en el refuerzo más caro en la historia de la institución.
Una vez concluida su participación con la Fiera, luego de perder la final contra el Atlas, el chileno tendría que reportar la Bella Airosa para unirse a la pretemporada del Pachuca; sin embargo, en el Bajío reportan que la dirigencia esmeralda buscaría renovarlo.
El caso de Dávila no es el primero de un jugador que resurge en León; tan solo en su actual plantilla tienen a Stiven Barreiro, Osvaldo Rodríguez y José David Ramírez, a quienes les costó su paso en la Bella Airosa, pero ahora en el Bajío se convirtieron en referentes.
Alejandro Velázquez I Pachuca
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