Sebastián Sosa confesó que su fugaz paso en la Bella Airosa se debió al nivel mostrado, en ese entonces, por Óscar Pérez.

La primera etapa del Superman en la Liga MX se dio en el Apertura 2015, cuando los Tuzos lo adquirieron y le plantearon un proyecto a mediano plazo en la institución.

“Recuerdo que cuando llegamos a Pachuca y la charla con el presi. La idea eran seis meses en Pachuca, en lo que se retiraba. Entrenaba y estaba a su lado. Lo veía y dije: ‘Este tipo no se va a retirar’. Cada cuatro partidos era figura”, expresó en una entrevista a ESPN.

Luego de solo tres partidos disputados en Copa MX, el arquero uruguayo volvió a Sudamérica para enrolarse a préstamo con un club argentino.

“Decidí ir a Rosario (Central) porque uno cuando empieza quiere jugar siempre y me sentí un poco inútil esos seis meses en Pachuca. Siempre quiero jugar. Viendo al Conejo como estaba y que no se iba en diciembre, vi que fue acertado porque jugó cuatro años más “, abundó.

Tras un año ausente, volvió al balompié mexicano, pues consideró que acá encontró a dos de sus primeros referentes en el arco: Jorge Campos y el propio Óscar Pérez.

“Eran arqueros que se salían de los clásico y tradicional. Jorge era muy arriesgado, un tipo que jugaba de nueve y el Conejo, por su peculiaridad de ser petiso (bajo de estatura) y los goles que hizo. Después hay grandes arqueros como Tala, como Chuy, el mismo Oswaldo Sánchez”, abundó.

Finalmente, aunque manifestó que le gustaría alcanzar una carrera como la del Cone, explicó que, a sus 33 años, ya toma algunos cursos para continuar ligado al futbol.

“Si me preguntas si lo elegiría, haría el ser entrenador y así seguir relacionado. Ser entrenador sería lo que le pediría hoy en día. Justamente estaba por empezar un curso de coach deportivo. Recién terminé el de gerente deportivo. Ya hice el de técnico y el de periodista deportivo. Es importante prepararse para el día después de mañana. Quiero tener todas las áreas trabajadas”, remató.

Redacción I Pachuca