Sergio Molina no se fue dolido de los 12 Guerreros.

Luego de desarrollarse la última asamblea FIBA de 2020, y con ella la salida del hispano del combinado mexicana de baloncesto, el entrenador de Borregos Hidalgo indicó que su paso al costado no fue con resentimiento.

Señaló que, por el contrario, se siente agradecido de que los directivos hayan encontrado en él a un perfil para cubrir un puesto tan importante como lo fue el de seleccionador.

“No, para nada (quedo adolorido), al contrario, muy agradecido por haber contado conmigo y creo que ahora se quedó en un buen sitio con Paco (Olmos), que es un buen entrenador y tiene la capacidad de llevar un buen proyecto”, dijo.

Señaló que a pesar de que por el momento se encuentra fuera de la estructura de los combinados aztecas, siempre estará para colaborar con el basquetbol mexicano.

Sobre cómo fue su salida, informó que esta se dio luego de la dimisión de Xóchitl Lagarda de la Asociación Deportiva Mexicana de Baloncesto (Ademeba), pues a pesar de que la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), y la Liga Nacional de Baloncesto Profesional (LNBP) le ofrecieron dar continuidad, hubo temas pendientes que no se cerraron.

“La liga me consideró para seguir, pero había compromisos que se habían acordado con anterioridad y no se dieron por sentados.

“Me quedé esperando la llamada de la Ademeba para saber sobre esos puntos y consideré

que lo mejor fue hacerme a un lado y la LNBP se hizo cargo, ellos me llamaron para seguir y, como te digo, no se cerraron muchos puntos”, detalló.

Sobre cuáles fueron algunos de los requisitos pendientes, indicó que fueron en materia sanitaria, pues la situación mundial no es para menospreciarse. “Estamos pasando un momento de pandemia importante y lo que a mí más me interesaba era llevar al staff y a los miembros del equipo con garantías y pudieran disputar esta serie de partidos internacionales sin alguna preocupación en ese sentido”, cerró.

Luis Carlos León I Pachuca