El estadounidense Denny Hamlin se llevó la victoria este domingo en la 61ª edición del Daytona 500 luego de esquivar varios accidentes al final de la carrera, dedicando su triunfo al copropietario del equipo JD. Gibbs, que falleció el mes pasado.

Hamlin, que no había ganado una prueba en 2018, sumó la trigesimotercera victoria de su trayectoria en su país y la segunda en Daytona tras la de 2016.

“Voy a tener una resaca terrible mañana, pero voy a recordar esto por el resto de mi vida”, celebró el ganador.

El exentrenador de los Washington Redskins de la NFL Joe Gibbs guio al equipo de automovilismo junto a su hijo JD. hasta que este murió el mes pasado a los 49 años debido a una enfermedad neurológica degenerativa.

“Lo que ha pasado aquí ha sido muy emotivo para todos nosotros. Que Denny corriera así ha sido increíble. Emocionalmente, estoy tocado. Lo que ha ocurrido aquí es verdaderamente irreal”, apuntó Joe Gibbs.

Hamlin, Kyle Busch y Erik Jones, todos con Toyota, coparon el podio, hecho que no ocurría desde 1993, cuando se dio algo similar.

La carrera más importante de la Nascar, en el Daytona International Speedway de Florida, dio el pistoletazo de salida a la campaña automovilística en Estados Unidos.

Dramático accidente: Con 10 vueltas restantes, Paul Menard perdió el control de su batería y provocó un accidente en cadena, en el que se vieron envueltos otros 18 pilotos, cuyos autos se llevaron la peor parte y sufrieron daños. Pese a ello, los conductores no presentaron heridas de gravedad.

AFP I Miami