El Barcelona no pudo pasar ayer del empate 3-3 en el campo del Levante en la antepenúltima jornada (36), dejando escapar la oportunidad de ponerse líder y, tal vez, LaLiga.

El Levante sufrió ante la presión alta de los azulgranas, metido en su campo para intentar salir al contraataque aprovechando los escasos errores de su rival en la circulación de balón.

Con dificultad, los locales lograron ir acercándose al área de Marc-André Ter Stegen, pero sin generar peligro, mientras el Barsa contaba sus llegadas por ocasiones.

Al fin, en una nueva llegada, Jordi Alba puso un centro al área, desviado por un defensa, que Lionel Messi remató de volea para hacer el 1-0 (25’).

El argentino, que había intervenido poco hasta ese momento, se apuntó su tanto 29 en el campeonato para seguir firme el camino de su octavo pichichi.

Apenas diez minutos después, Ousmane Dembélé aprovechó un pase en profundidad de Messi para servir un balón que empujó Pedri al fondo de las redes levantinistas (34’).

El Barsa se fue al descanso controlando completamente el partido, pero a la vuelta dio un frenazo en su juego aprovechado por el Levante, que salió a presionar la salida del rival.

A los diez minutos, Melero superó a Sergi Roberto para cabecear el 2-1 (57’) y sin tiempo para la reacción de los azulgranas, José Luis Morales hizo el empate de disparo cruzado (60’).

En apenas dos minutos, el Barsa veía escaparse dos puntos y un partido que tenía controlado.

Los azulgranas volvieron a dar un punto de intensidad a su juego y recuperaron el control de la pelota para adelantarse de nuevo cuando Dembélé puso el 3-2 de disparo cruzado (64’).

El Barsa trató de bajar las revoluciones del partido y llevar la batuta del partido, pero el Levante no bajó los brazos y tuvo su premio cuando Sergio León se adelantó a Piqué en el área pequeña para hacer el 3-3 (83’).

AFP I Barcelona