Apenas empezaba este milenio cuando en la Arena Afición apareció una facción que marcó el ritmo de este deporte cerca de 10 años: Los Tuzos Infernales.

“En aquel tiempo la arena Afición fue casa de los Tuzos Infernales, ahí nacieron y la verdad no sé porque se desintegró”, recordó.

De aquellos tres sanguinarios luchadores solo sobrevine él, y después de un año alejado de los cuadriláteros retomó su actividad, aunque ya con más de 60 años de edad, el experimentado gladiador dijo que el retiro está muy cercano; no obstante, el tiempo que le queda activo, afirmó, se entregará a 100 por ciento a complacer a su gente.

“Como ya se desintegró, entonces ya entro yo, pero yo creo que muy pronto también vamos a decirle adiós a los cuadriláteros para darle cabida a las nuevas generaciones que viene”, dijo.

Al representar a un animal característico de la ciudad, recordó que, pese a pertenecer al bando rudo, el público siempre los apoyó en los intensos choques que sostuvieron ante el Tiburón Jr y Jorge el Intruso.

Sobre la actualidad de la lucha libre, comentó que sí hay una buena camada de gladiadores en la entidad, pero consideró que igual hay otros tantos “hecho al exprés”.

“Hay muchas caras nuevas, muchos jóvenes con grandes cualidades; hay mucho material humano para que salgan buenos campeones, (pero otros que) no le echan al 100; si les gusta hay que echarle, si no pueden aquí que les busquen”, comentó.

En ese sentido, destacó que tiene bajo su tutela a un grupo de jóvenes, pues comentó que practicar lucha libre es la llave para alejar a la juventud de los vicios y el sedentarismo.

Alejandro Velázquez I Pachuca