Quieren cenicientas avanzar en la Euro
Dinamarca-República Checa, único choque Eurocopa entre dos excampeones

Dinamarca-República Checa, único choque Eurocopa entre dos excampeones, propone un partido inesperado entre dos naciones de glorioso pasado y que basan su potencial en el colectivo, hoy en Bakú.
Ambos cuentan con algunas individualidades que se están dando a conocer. Es el caso de Patrik Schick: el segundo mejor goleador de la competición (4) apuntó su nombre para la posteridad con su globo en el minuto 49 contra Escocia, al igual que hiciera su compatriota Antonin Panenka con su peculiar lanzamiento de penal que al que dio nombre en 1976.
Bajo la antigua denominación de Checoslovaquia, y en unión con los eslovacos, hasta 1994, conquistaron la Euro de 1976 y fueron finalistas de los Mundiales de 1934 y 1962. La República Checa de Karel Poborsky y Vladimir Smicer alcanzó la final de la Eurocopa 1996, perdida contra Alemania.
Por parte danesa el vínculo con el pasado es aún más directo: Kasper Schmeichel defiende la portería danesa como hiciese su padre Peter con la Danish Dynamite, sorprendente campeona de la Eurocopa 1992, a la que los escandinavos llegaron invitados ante la baja de una Yugoslavia en guerra.
Los equipos actuales de la República Checa y de Dinamarca se valen de un pasado glorioso pero también de un colectivo temible.
AFP I Bakú