La era de Diego Alonso terminó y no lo hizo de la mejor manera, el equipo hidalguense acumuló tres torneos sin entrar a la liguilla. Con un nuevo cuerpo técnico, encabezado por Pako Ayestarán, Pachuca busca resurgir y regresar al sitio en el cual se acostumbró a estar, entre los equipos fuertes y que siempre disputan el campeonato.

Desafortunadamente para la institución blanquiazul, los aficionados no esperan mucho de ellos, ni de su nuevo entrenador, por lo que desde el primer partido tiene la misión de cambiar esa percepción, consiguiendo resultados positivos desde la primera jornada del Apertura 2018 de la Liga MX.

En la primera década del nuevo milenio, los hidalguenses vivieron una época dorada, con cuatro campeonatos de liga y cuatro de la Liga de Campeones de la Concacaf; sin embargo, todo lo que sube, tiene que bajar y fue hasta la llegada de Alonso, cuando lograron regresar al protagonismo y el timonel español no tendrá una tarea sencilla, pues los seguidores hidalguenses están ávidos por regresa a la liguilla.

Pocos movimientos hubo en el plantel blanquiazul, la directiva apostó por la continuidad, sin duda la baja más delicada fue la del japonés, Keisuke Honda, quien decidió dejar el futbol mexicano, otro jugador que será difícil de suplir es el norteamericano Omar González, quien fue traspasado al Atlas.

Otros jugadores que salieron de Pachuca fueron Kekutah Manneh, Dairon Mosquera, Walter González, Joaquín Esquivel y Juan José Calero.

Tampoco hubo muchas incorporaciones, el más llamativo fue Steven Barreiro (proveniente de Atlas) y desde el Ascenso llegaron Elbis Sousa, Miguel Ángel Tapias y Juan David Pérez.

Marco Iván Patiño I Pachuca