Una vez más, la Selección Mexicana fracasó en el Mundial Juvenil.
La categoría sub 20 nunca se le ha dado al tricolor y ahora quedaron eliminados tras dos derrotas en igual número de partidos, a pesar de tener una buena generación de futbolistas.
Ya pasó en dos ocasiones con generaciones de campeones mundiales sub 17 y ha pasado con buenas camadas de futbolistas, pero México no puede tener trascendencia en este torneo que reúne a las jóvenes promesas del balompié.
Ahora, pese a tener jugadores que ya juegan en primera división y son titulares con sus equipos, o que ya juegan en Europa, caso Diego Lainez, el Tri consumó temprano un gran fracaso.
El técnico Diego Ramírez se vio carente de ideas para reaccionar en ambos encuentros, lo que dejó a su escuadra sin poder reaccionar al verse abajo en el marcador. Al exauxiliar del Piojo Herrera le falta aún más experiencia en el banquillo, como se vio bien en esta justa.
Bien decía un amigo tras el primer juego del Tri, en la caída ante Italia: ¿por qué en México no le damos la oportunidad a un técnico experimentado de llevar las riendas de una selección menor y se la damos a entrenadores en formación?
Está bien, estas categorías menores sirven para que los entrenadores jóvenes agarren callo y experiencia para el futuro, pero quizá, por cómo es la Selección Mexicana, sería interesante llevar a un técnico ya con esa trayectoria a dirigir un torneo de este tipo.
Mientras, solo queda lamentar otro fracaso en un Mundial Juvenil, aun teniendo a un tipo como Lainez, que no pudo mostrar nada por la marca personal que le hicieron italianos y japoneses y que no le permitió mostrar su futbol, o Juan José Macías, que creo fue el mejor hombre del Tri, mostrando el buen momento que vive.
Hay buenos prospectos en este equipo que, ojalá, puedan ir teniendo más minutos en la Liga MX, como son los jugadores de los Tuzos del Pachuca, principalmente Roberto de la Rosa y Tony Figueroa, quienes ya han tenido minutos, pero en la última campaña casi no tuvieron oportunidad bajo el mando de Martín Palermo.
Al lateral Kevin Álvarez se le ve bien, al igual que Efraín Orona, quienes podrían ser pronto tomados en cuenta para la plantilla del primer equipo e ir ganando experiencia.
Ojalá haya más suerte en próximos torneos y se les dé más seriedad, más preparación y con tipos más experimentados afuera que puedan contagiar a los chavos.
Alfonso Rivera
