El capitán del Tottenham Hotspur Hugo Lloris no deberá pasar por el quirófano por su lesión en el codo producida el pasado sábado, pero su club confirmó que el arquero estará de baja lo que queda del año.

“Los resultados (de las nuevas pruebas médicas) han mostrado que no es necesaria una operación quirúrgica, pero nuestro capitán sufre una lesión de ligamentos y no volverá a los entrenamientos hasta finales de 2019”, anunció el club londinense en un comunicado publicado ayer.

El pasado sábado, en la derrota de los Spurs en Brighton (3-0), Lloris sufrió una luxación en el codo izquierdo tras cometer un error que le costó el primer gol en contra a su equipo en el minuto 3.

Calculó mal su salida en un centro y entró en la portería con el balón antes de caer y hacerse daño.

Su codo se dobló hacia dentro y el arquero recibió atención médica durante cerca de cinco minutos. Salió en camilla e inhalando un analgésico gaseoso.

Este lunes, en la concentración de la selección francesa, el entrenador Didier Deschamps ya había anunciado que Lloris será baja hasta el próximo año “casi seguro”.

“Es difícil saber con exactitud cuánto tiempo estará de baja. Por lo que nos concierne, no estará en esta concentración ni en la próxima”, dijo Deschamps, añadiendo que la posibilidad de fractura “está descartada”.

“No soy un especialista, pero no volverá a jugar en 2019, eso es casi seguro”, continuó el seleccionador francés, quien perderá a su capitán para los duelos ante Islandia y Turquía, el 11 y 14 de noviembre, clasificatorios para la Eurocopa 2020, y ante Albania y Moldavia, en noviembre.

Deschamps confirmó que le sustituirá en la portería del campeón mundial el arquero del Marsella Steve Mandanda.

AFP | Francia