El judoca hidalguense Nabor Castillo Pérez se quedó a la orilla de las medallas en los Juegos Panamericanos Lima 2019 en los -66 kilogramos.

El oriundo de Omitlán abrió de buena forma su competencia, venció por la vía del waza-ari al estadunidense Ryan Vargas, continuó su carrera en busca del segundo podio continental en su carrera, tras la plata de Guadalajara 2011.

Sin embargo, el brasileño Daniel Cargnin fue el rival que lo sacó de la lucha por el oro, en un duelo bastante atropellado, que se tuvo que parar debido a una herida en el rostro del hidalguense. Castillo fue eliminado gracias a una triple amonestación y un ippon del carioca.

A pesar de ello, la esperanza del bronce continuó latente, ya que pasó de bye en la final del repechaje; sin embargo, en la pelea definitiva se enfrentó a uno de sus némesis desde su cambio de división: el cubano Osniel Solís.

A pesar de que el omitlense ya lo había derrotado en otras competencias, las victorias en enfrentamientos directos han favorecido históricamente al caribeño, hecho que daba una desventaja al seleccionado azteca.

En un pleito trabado, en el que se tuvieron que ir a punto de oro, y tras varias interrupciones debido al estado físico de Nabor, que estaba envuelto de la parte superior de la cabeza con vendas elásticas y gasas, el isleño sacó la experiencia y derrotó por la vía del ippon al mexicano, por lo que las esperanzas de una tercera medalla para algún atleta hidalguense se esfumó.

Con el cuarto puesto de Nabor se dio por cerrada la participación de los atletas estatales en la justa continental, cosechando una medalla de oro, obra de Daniela Campuzano; una de plata, de Luz María Olvera; un cuarto puesto, a manos de Castillo; un quinto lugar, para Alejandra Romero; un cuarto lugar por equipos, para Martha Fernanda del Valle, quien culminó en 13 en la prueba individual de equitación, y un séptimo lugar en el basquetbol, en el que participó Israel Gutiérrez.

Luis Carlos León | Pachuca