Luz María Olvera Suárez regresó con paso fuerte a los tatamis internacionales; en tanto, Nabor Castillo deja más lejana la posibilidad de acudir a Juegos Olímpicos.

Con una medalla de plata, la pachuqueña, que compite en los -52 kilogramos, se quedó en la antesala de la gloria continental, tras caer en el combate decisivo ante la canadiense Ecaterina Guica.

Olvera Suárez tuvo un inicio complicado ante la brasileña Valentim Eleudis, a quien venció con un waza-ari.

En el segundo combate, de semifinal, y a los 3:42, le hizo un ippon a la cubana Nahomys Acosta, lo que le aseguraba una presea.

Poco le duró el gusto a Luzma, pues a los 12 segundos la canadiense la derribó de forma fatídica y la dejó sin posibilidad de colgarse el oro.

Aun así, sumó una presea más a su historial y agregó puntos a su ranking olímpico que la pueden catapultar a la cita olímpica en territorio nipón.

Por su parte, Castillo Pérez, tuvo un amargo final en los -66 kilos.

El inicio pintó bien para el de Omitlán, pues derrotó por la vía del ippon al venezolano Andrés Pariche y se puso en los cuartos de final ante su némesis, el cubano Osniel Solís.

Fue en dicha ronda en la que, por medio de la misma fórmula quedó fuera de la batalla por el oro o la plata; sin embargo, le quedó, la oportunidad de obtener un bronce.

El destino le emparejó con el cubano Juan Postigos, a quien derrotó con claridad, nuevamente por la vía del ippon, con 1:51 minutos en el crono.

Ya en el combate final, ante Tal Almog, de Argentina, ambos lucieron el cansancio, pero Castillo Pérez se quedó cerca de la presea, pues estuvo a una amonestación de echar al pampero, pero un solitario waza-ari terminó por sacarlo del podio.

Con el quinto puesto, las posibilidades de ir a Japón para Nabor se cierran a un margen complicado, y solo participaciones de excelencia el próximo año le darían sus segundos Juegos Olímpicos.

Luis Carlos León I Pachuca