Un equipo que viene de conseguir siete títulos nacionales consecutivos y de fichar a uno de los mejores atacantes del mundo, ¿puede estar preocupado? La Juventus de Turín y Cristiano Ronaldo parecen no tener rival en Italia, pero su obsesión por la Liga de Campeones deja una esperanza a Nápoles, Inter o Roma.
Con el club bianconero preparado para empezar este sábado la temporada en la Serie A en Verona contra el Chievo, la excitación es considerable en torno a Cristiano Ronaldo, porque el Calcio no había contado con un talento de su nivel desde la fastuosa década de los 90.
Pero la Juventus piensa insistentemente en la Liga de Campeones. Después de siete campeonatos consecutivos, tras cuatro dobletes seguidos, la Vecchia Signora quiere más. Desea la Champions League, inaccesible para ellos desde 1996, con cinco finales perdidas, las dos últimas en 2015 y 2017.
Así pues, la Juve ha recurrido a un especialista, el especialista. Ronaldo, en efecto, ha levantado cinco veces el trofeo y ha sido siete veces el máximo goleador de la competición.
Durante la primera aparición del portugués bajo la camiseta negra y blanca, la semana pasada con ocasión del tradicional partido amistoso Juve A-Juve B, el presidente Andrea Agnelli fue claro a propósito de la Liga de Campeones: “Hemos pasado del sueño al objetivo”.
Roma | AFP