España ganó ayer 2-1 a Inglaterra en Londres dentro de la nueva Liga de Naciones, en el debut de Luis Enrique al mando de la Roja, en un partido con polémica final por un gol anulado a Inglaterra en el 97’.

Marcus Rashford adelantó a los ingleses (11’), pero dos minutos después Saúl empató (13’) y Rodrigo Moreno remató un saque de esquina para hacer el 2-1 (32’).

La nueva Roja de Luis Enrique fue de menos a más en el estadio de Wembley, en un partido que empezó con homenaje a Harry Kane, que recibió la bota de oro como mejor goleador del pasado Mundial de Rusia 2018, en el que Inglaterra acabó cuarta.

Ambos equipos buscaron la presión alta para dificultar la salida del juego contrario con España intentando superar a su rival por las bandas.

A los 11 minutos, Shaw metió un pase medido al área, que Rashford definió para hacer el 1-0, pero apenas dos minutos después, Rodrigo llegó hasta la línea de fondo y dejó atrás un balón que Saúl alojó en las redes inglesas (13’).

El jugador del Atlético de Madrid fue uno de los hombres más activos de España, que se hizo con el balón para buscar profundidad y verticalidad, encerrando a Inglaterra en la última parte del primer tiempo.

Los ingleses, con dificultades para superar la presión española, acabaron recurriendo al juego en largo buscando a Kane.

Con España dominando, llegó el segundo gol cuando Thiago botó una falta desde la izquierda, que Rodrigo remató en boca de gol arrancando desde atrás para hacer el 2-1 (32’).

Inglaterra, que no acababa de de superar la presión española, tuvo una buena oportunidad de empatar cuando Rashford se sacó un cabezazo a bocajarro que obligó al meta David de Gea a sacar una mano salvadora (35’).

Tras el descanso, el partido comenzó con más tranquilidad, enfriado por el susto dado por el lateral inglés Luke Shaw, que tuvo que ser retirado en camilla tras recibir un duro golpe en la cabeza en un choque con el defensa español Dani Carvajal.

En los últimos 20 minutos, Inglaterra dio un paso adelante ante una España que se fue atrás.

A diez minutos del final, Rashford metió un disparo a bocajarro que sacó de nuevo De Gea (80), que sería el protagonista del final del partido.

En el tiempo de descuento, De Gea perdió un balón que tenía agarrado al caer sobre Welbeck en el área pequeña, lo que aprovechó el jugador inglés para marcar un gol que habría supuesto el empate pero fue anulado
por falta al portero (97).

AFP I Londres