La afición de Monarcas sigue de pie, mientras que sus directivos callan.
Ayer, seguidores rojiamarillos volvieron a salir a la calle, sin importar la cuarentena, para manifestarse por la salida de su equipo a Mazatlán y la falta de claridad existe sobre el tema.
“Lo que se está buscando es que el Gobierno del Estado o la directiva digan algo, pero que digan, porque no han dicho nada, tanto unos como otros se han quedado callados. Vivir en la incertidumbre daña”, declaró a Grupo Reforma el líder de la Barra Locura 81 Pedro Cervantes.
La madrugada del domingo, seguidores acamparon para bloquear los accesos al estadio Morelos después de que el sábado una decena de camiones cargó mobiliario del equipo.
Horas más tarde se reunieron en la antigua casa de los purépechas, el Estadio Venustiano Carranza, para iniciar una marcha que juntó a más de 200 personas y decenas de vehículos que también apoyaron a las Fuerzas Básicas y Equipo Femenil del club, que a diferencia del primer equipo, no tienen su futuro definido.
Francisco Esquivel I Agencia Reforma