Las Águilas de Filadelfia son un mejor equipo que aquel derrotado en la Semana 6 por los Buccaneros de
Tampa Bay.

Aún así, hay muchas razones para que los actuales campeones defensores sean favoritos por 8.5 puntos cuando se enfrenten el próximo domingo en la Ronda de Comodines de la
Conferencia Nacional.

Hasta arriba de la lista está el hecho de que los Bucs derrotaron fácilmente a las Águilas en su enfrentamiento de la Temporada Regular.

Tampa Bay (13-4) construyó una ventaja de 28-7 en el tercer cuarto ante Filadelfia (9-8) y la aguantaron para ganar 28-22 como visitantes en aquel duelo de jueves por la noche, el pasado 14 de octubre.

La derrota llevó a un giro en la estrategia ofensiva de los Eagles. Una semana después volvieron a perder en

Las Vegas para poner su marca 2-5, pero respondieron con un récord de 7-2 después de ello para asegurar su boleto a Playoffs, antes de dar descanso a sus titulares el sábado pasado, en la derrota 51-26 contra Dallas.
“Mirando el partido pasado (contra Tampa), siento que no es el mismo equipo que tenemos ahora. En cuanto a los jugadores es muy similar, pero la forma en la que este equipo ataca es completamente diferente’’, dijo el ala cerrada Dallas Goedert.

Goedert y el tackle derecho Lane Johnson no estuvieron presentes en el partido en octubre; los Bucs no tuvieron al ala cerrada Rob Gronkowski.

“Comenzó a cambiar en ese partido (en Las Vegas), en cuanto a quienes éramos y qué estábamos haciendo’’, dijo el entrenador en jefe Nick Sirianni.

Sirianni comentó que él y su cuerpo de entrenadores utilizaron días adicionales después del revés contra Tampa Bay para replantear su aproximación y construir la estrategia alrededor de una línea ofensiva dominante y apostar más a los acarreos.

Filadelfia terminó con el mejor ataque terrestre de la NFL, con 159.7 yardas en promedio por partido.

Contra los Bucs, el quarterback Jalen Hurts hizo jugadas por tierra (10 acarreos, 44 yardas), pero Miles Sanders fue el único corredor que tocó el balón. Efectuó nueve acarreos para 56 yardas y solo uno de sus toques de balón fue en la primera mitad.

Hurts, quien a sus 23 años será el quarterback más joven en iniciar un partido de playoff para Filadelfia, mostró señales de madurez como pasador conforme avanzó su segunda temporada en la Liga. Solamente lanzó 115 yardas en contra de Tampa Bay, con un rating de 55.8 que fue su segundo más bajo del año. En sus últimas tres apariciones de la temporada registró ratings de 110.4, 102.5 y 90.9.

Las Águilas distan mucho de ser aquel equipo que no tenía rumbo a mitad de temporada en la NFL. Ahora serán un verdadero peligro para los Bucaneros de Tampa Bay.

Joani Cruz | Agencia Reforma