La Arena Afición albergó ayer un emotivo festejo por el Día Nacional de la Lucha Libre y del Luchador Profesional.
El anfitrión Saúl Alejandro Ávila López, secretario de la Asociación de Luchadores del Estado de Hidalgo, afirmó que la reunión sirvió para quitarle un poco el estrés a sus compañeros, quienes han estado en confinamiento y con poca actividad por la pandemia de Covid-19.
“Es el segundo festejo. Tras más de un año complicado, creo que todos teníamos necesidad, por un ratito, de volver a vernos, por eso decidimos celebrarlo; claro, con todas las medidas de seguridad”, mencionó el también esteta en activo, conocido como El Áspid.
Agregó que acudieron 42 personajes que han dedicado su vida a este deporte, defiendo la bandera del estado
en diversas partes del país.
“Son de todas las empresas; esta vez no hubo distinción; vinieron luchadores y compañeros que ya están retirados”, abundó.
En 88 años que lleva el pancracio en México, Hidalgo juega una parte importante al ser cuna de varios ídolos nacionales e internacionales.
“Es la cúspide, porque de aquí han salido grandes figuras, como El Santo, El Nazi, Karloff Lagarde y, recientemente, Súper Crazy”, expresó.
Asimismo, mencionó que, por el nivel de sus representantes y la exigencia de su público, la entidad siempre fue parámetro para las grandes empresas.
“A los del Consejo Mundial de Lucha Libre, si querían triunfar, los mandaban a acá, les decían ‘si quieres triunfar, vete a Pachuca, si el público de la Afición te aplaude, vas a tener una buena carrera, pero si te abuchea, no sirves para luchador’, y fue una premisa para todos”, señaló.
Finalmente, hizo un llamado para que se respalde a sus compañeros, pues consideró que aún faltan garantías para protegerlos.
“Que las autoridades nos volteen a ver; hace falta una comisión, que nos den infraestructura e instalaciones
deportivas”, remató.
Alejandro Velázquez I Pachuca