Bolonia, Sassuolo y Parma abrirán sus terrenos de entrenamiento exteriores para los jugadores de sus planteles que deseen ejercitarse allí, después de haber recibido la autorización pertinente de la región de Emilia-Romaña, anunciaron ayer los equipos.
Las formaciones de la Serie A insistieron de manera unánime el viernes en su deseo de terminar el campeonato liguero en curso, que está interrumpido desde marzo por la pandemia del nuevo coronavirus.
Una decisión al respecto podría darse en los próximos días.
Oficialmente, los entrenamientos no son posibles hasta el 18 de mayo para los deportes colectivos. En el caso de las disciplinas individuales estarán autorizados desde mañana.
La región de Emilia-Romaña (norte), el viernes, y luego la de Campania (sur), ayer, se mostraron favorables a una apertura de los centros desde el lunes, pese a la tensión entre el Estado central y algunas regiones sobre el ritmo del plan de desconfinamiento, que comienza el lunes.
El Sassuolo precisó que únicamente será para los jugadores que lo deseen y en terrenos al aire libre. Tanto los vestuarios como las oficinas y la sala de preparación física continuarán cerrados.
El Bolonia señaló también que únicamente se trata de instalaciones al exterior, los que abrirán desde el martes.
En Parma, el plantel del primer equipo podrá disfrutar de los campos de entrenamiento a partir de la próxima semana, pero únicamente de manera voluntaria y para una actividad física individual.
El Nápoles y la SPAL no manifestaron por el momento sus planes, pero según la prensa, la autorización de
la región de Campania se dio tras una solicitud del club napolitano.
Otras regiones podrían tomar idénticas medidas, como el Lazio, la región en la que está Roma.
AFP | Roma