Después de más de un mes de inactividad de la Asociación Hidalguense de Ciclismo, la situación entre sus agremiados ha causado hermetismo, ya que la directiva a cargo de José Carlos Chicote Valdez, no ha dado muestras
de su función.

De igual manera, Antonio Silva, como encargado del ciclismo de montaña, se ha mostrado al margen de esta actividad, ante la incertidumbre de sus agremiados, que practican esta disciplina.

Por fuentes del medio, se conoce que José Carlos Valdez, como presidente interino, ante la renuncia de su exdirigente Noé Lizardi, se ha dedicado a sus actividades personales, sin tener contacto con el gremio.

La ausencia de directivos y la falta de comunicación ante los medios de comunicación sobre las competencias que restan en el año ha causado molestia, ya que clubes agremiados han tenido que recurrir a las rodadas de invitación.

Cabe recordar que la AHC resurgió con el nombramiento de Noé Lizardi, después de ser reconocida por el dirigente de la Federación Mexicana de Ciclismo, Edgardo Hernández, logrando importantes conquistas en la Olimpiada Nacional y corredores con un gran nivel, que los ha llevado a participar en el extranjero.

También se debe mencionar que la otra agrupación de ciclismo no afiliada a la FMC se ha mantenido organizando competencias en diferentes municipios, a donde han acudido los corredores que tradicionalmente venían compitiendo en el serial estatal.

La situación es alarmante, porque el ciclismo en Hidalgo se está dividiendo y los papás de los infantiles y juveniles han manifestado su malestar por esta situación que se vive.

Sería lamentable que lo hecho por Noé Lizardi se viniera abajo, después de varios años de trabajo y excelen-
tes resultados.

Es conveniente recordar que José Carlos Valdez se comprometió con directivos, padres de familia y corredores a darle continuidad al proceso, durante su nombramiento como presidente interino, lo que no ha cumplido y mucho menos ha hecho acto de presencia.

Francisco Lozada