Barcelona hizo su trabajo al derrotar ayer 2-0 al Osasuna, en El Sadar, para afianzarse en el segundo lugar de LaLiga, a la espera de que Atlético de Madrid y Real Madrid se quiten puntos en su enfrentamiento de hoy.

Lionel Messi y compañía no tuvieron una noche tranquila en Pamplona, ya que el local se comportó a la altura, e incluso se animó a atacar cuando tuvo la posibilidad.

Pese a ello, Barcelona pudo controlar sus emociones y sacar un triunfo que, de combinarse con una derrota del Atlético ante el Madrid, dejará al rojo vivo la lucha por el título de LaLiga.

El único tanto del encuentro llegó al 30’, luego de que Messi dibujó una asistencia perfecta para Jordi Alba, quien apareció por izquierda, y tras bajar el balón, sacó un disparo violento que superó al arquero Sergio Herrera para el 1-0 del Barcelona.

La genialidad de Messi y Alba abrió el cerrojo de un Osasuna que se mantuvo ordenado pese a la desventaja.

Ya para la segunda parte, el partido se trabó desde el medio campo. Aún así, los visitantes mantuvieron la posesión del balón y al 83’, Ilaix Moriba, quien ingresó de cambio, marcó el 2-0 con un zapatazo violento desde fuera del área.

Así, Barcelona se aseguró un nuevo triunfo, 56 puntos y la posibilidad de ver al Atlético y al Madrid quitarse puntos en el derbi.

“HAY LIGA”

El entrenador del Barcelona, Ronald Koeman, señaló tras la victoria “hay liga hasta final de temporada” gracias al resultado obtenido en El Sadar, que coloca a los culés a dos puntos del liderato.

El técnico holandés dijo que el cambio de Dembelé por Umtiti en el descanso fue con la idea de ganar “más control del partido”, tras una reñida primera mitad.

Sobre el debut goleador de Ilaix Moriba, su entrenador, opinó que ayudó a su equipo a ganar “un partido complicado” dando un “extra” al Barcelona.

“Con balón está bien, físicamente es fuerte y está ganando terreno para estar más con el primer equipo”, explicó sobre el joven guineano.

Staff I Agencia Reforma