El atacante de la selección egipcia Mohamed Salah, lesionado el 26 de mayo defendiendo la camiseta del Liverpool en la final de la Champions League, estuvo presente ayer en el entrenamiento de Egipto en El Cairo, pero no corrió, constató la AFP.

Este último entrenamiento de Los Faraones, antes de partir para el Mundial-2018 en Rusia, se desarrolló ante miles de espectadores. Los jugadores, entre ellos Salah, saltaron al césped bajo los aplausos y los gritos de la afición.

Mohamed Salah, quien lució el uniforme rojo de los Faraones, se quedó de pie en el centro del terreno de juego, hablando con los miembros del cuerpo técnico mientras sus compañeros si entrenaron. El delantero del Liverpool saludó al público, que le aplaudió abundantemente.

Hoy, Salah y sus compañeros deben volar para Rusia donde la selección africana jugará su primer partido el 15 de junio contra Uruguay.

La lesión en el hombro de Salah había despertado el nerviosismo entre los aficionados egipcios que temían que la estrella no pudiera participar en el Mundial.

Pero el atacante fue seleccionado para estar en Rusia, anunció la Federación de Egipto a finales de mayo. Este organismo precisó entonces que Salah podría estar de baja tres semanas, lo que podría impedir su participación en el primer partido, el 15 de junio.

Clasificados por primera vez después de 1990 para el Mundial, los Faraones, que están encuadrados en el grupo A, también se medirán en la primera fase a Rusia (19 de junio) y a Arabia Saudita (25 de junio).

AFP I El Cairo