Una decisión de superioridad por técnica de puño fue clave para que la doble medallista mundial, Briseida Acosta, consiguiera su plaza olímpica ante la triple medallista olímpica María del Rosario Espinoza.
El combate que definía el boleto de Taekwondo a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 en la categoría + 67 kg fue tan cerrado que tuvo que definirse en un cuarto round, luego del empate 8-8 en el último segundo del tercer asalto.
“El puño de Briseida en el cuarto round le da mucha más confianza y pone más presión para María. Ellas saben, porque tienen un gran palmarés, y conocen perfectamente el reglamento y los criterios de desempate”, explicó vía telefónica Nubia Segundo, árbitro mexicana de Taekwondo y coordinadora de árbitros internacionales de México.
Durante el primer round del combate que se desarrolló en el CNAR, ambas peleadoras se estudiaron y administraron sus recursos.
“Se conocen perfectamente. En el primer round María tuvo la ventaja con una técnica de puño -que sabemos es su fuerte- y puso el 1-0. En segundo el round empatan por sanciones y queda 2-2.
“Para el tercero tenían que soltarse más y fueron más agresivas en ataques y contraataques, fue un round muy cardiaco y llegó a quedar 6-2 con amplia ventaja para María. Pero, Briseida nunca se dio por vencida, llegó a estar arriba en el marcador con una técnica a la cabeza que le conectó a María, 8-6 favor Briseida”, profundizó la juez que asistió a Río 2016.
Hacia el final del tercer round, María buscó por sanción, hizo que Briseida saliera del área y se acerca 8-7, y en el último segundo logró asestar otro puño para empatar 8-8, lo que obligó al cuarto round.
Yarek Gayosso
Agencia Reforma