La embajada de Corea del Sur en México se convirtió en un templo en el que se venera la victoria 2-0 ante Alemania, vigente campeón, ahora eliminada del Mundial, y que le dio el pase al Tricolor a los octavos de final de Rusia 2018.

Aproximadamente 350 personas se dieron cita en la embajada asiática en el país, en su mayoría aficionados tricolores, para celebrar con cánticos la actuación del conjunto asiático.

Enfundados con la playera tricolor, con la bandera de México en mano como estandarte, visitaron la embajada y el Centro Cultural Coreano, donde fueron recibidos por el director Kijin Song.

“El pueblo de Corea felicita a la Selección Mexicana y su afición por el pase a octavos de final”, fue el mensaje que envió el embajador de Corea del Sur, Kim Sang-il, quien se encuentra en Monterrey.

Corea quedó eliminada del Mundial, pero su embajada en México se convirtió en un santuario para celebrar.

Mientras, el Ángel de la Independencia recibió a unos 15 mil aficionados aztecas, quienes festejaron efusivamente.

Yarek Gayosso I Agencia Reforma