Herida de muerte por dos derrotas que la tienen en riesgo de eliminación, Bolivia se juegan hoy la vida en la Copa América de Brasil 2020 cuando enfrente a Uruguay, que intenta hacer leña del árbol caído con la Verde para sellar su clasificación a cuartos.

Son dos realidades muy distintas las que choquen en la Arena Pantanal, aunque la necesidad de ganar es la misma para ambas.

Bolivia es colista del grupo A y precisa imperiosamente los tres puntos en juego para superar a la Celeste, cuarta con una unidad. Pero eso no es lo peor para la Verde. Argentina será su rival el próximo lunes en el cierre de la fase de grupos, por lo que las posibilidades de sumar se reducen al choque con la Celeste.

“Si queremos lograr cosas tenemos que dar uno o dos pasos hacia adelante en este partido”, dijo previo a duelo el DT de Bolivia, César Farías.

Menos dramático es el panorama de Uruguay. El punto ante Chile (1-1) le dio oxígeno luego del resbalón (1-0) ante la Albiceleste, por lo que una victoria ante Bolivia, a falta del partido del lunes ante Paraguay, será suficiente para acomodarse en la siguiente fase.

“Vamos a salir a buscar lo que queremos, con equilibrio y apuntando a los jugadores que tenemos. Una victoria nos pone en una situación mejor, pero hay que jugar el cuarto partido. Por eso el de mañana (jueves) lo tomamos como una final”, advirtió, a su turno, el Maestro Óscar Tabárez.

AFP I Cuiabá