Los vigentes ganadores de la Major League Soccer (MLS) y la Liga MX, el Columbus Crew y el Cruz Azul, se ven las caras hoy en la tercera edición de la Campeones Cup, aplazada el año pasado debido a la pandemia de coronavirus.

El torneo, que vuelve a medir el nivel de estas ligas vecinas, se definirá a partido único en el Lower.com Field, el nuevo estadio de Columbus (Ohio), inaugurado a mitad de año.

“Es un partido muy lindo para jugar”, dijo ayer la estrella del equipo estadunidense, el argentino Lucas Zelarayán, quien ya levantó este trofeo en la primera edición de 2018 cuando formaba parte del Tigres mexicano.

Esta competencia es parte de la alianza entre ambas ligas, que este año celebraron otros eventos conjuntos como la League Cup o el Juego de las Estrellas (All-Star) de Los Ángeles.

El talentoso mediapunta, de 29 años, lideró el pasado diciembre a Columbus a su segundo triunfo en la MLS Cup con una exhibición de dos goles y una asistencia en la goleada 3-0 ante Seattle Sounders.

Ha desplegado su mejor futbol en Estados Unidos y aspira ahora a brindar a Columbus su primer título internacional.

“Para mí es importante enfrentar a Cruz Azul y a cualquier equipo de la liga mexicana, siempre será especial para mí. Jugué en Tigres y es una liga que conozco mucho y de la que tengo muchos recuerdos”, dijo.

Este año, Columbus no ha podido mantener el impulso de 2020 y se encuentra fuera de los puestos que dan acceso a playoffs, con un partido clave por disputar este mismo domingo ante Philadelphia Union.

“Es una semana importante pero nuestra prioridad en este club siempre es ganar trofeos. La prioridad mañana es ganar”, recalcó el técnico Caleb Porter, que alabó el nivel de su rival mexicano.

“Cruz Azul es un equipo muy difícil, extremadamente talentoso, que juega con diferentes tácticas”, describió.

La liga mexicana se quedó con la primera edición de la Campeones Cup gracias al triunfo de Tigres 3-1 ante Toronto en 2018 mientras la MLS se hizo con la segunda al derrotar el Atlanta United 3-2 al América en 2019.

Tras un parón de un año por la pandemia de coronavirus, Cruz Azul tratará de devolver el trofeo a México luego de coronarse campeón de la Liga MX el pasado mayo.

La Máquina Celeste se quitó de encima 23 años de sequía en el torneo local pero en las últimas semanas atraviesa por una racha de malos resultados que le costó la eliminación a mediados de mes en las semifinales de la Liga de Campeones de la Concacaf ante el Monterrey.

Tras su empate en Puebla del viernes, Cruz Azul ocupa la sexta posición del torneo Grita México A21.

AFP I Los Angeles