¿Cuántas veces hemos escuchado que el arte libera o nos hemos emocionado con alguna pintura o una canción o incluso hemos compartido el dolor de los creadores? El arte es así, permite conectar con otros seres humanos, pero en el caso del pintor Genaro Hernández, el arte le está ayudando a sanar.
Hace unas semanas, Genaro, quien no solo se dedica a la pintura, sino también al arte plumario y a la actuación, además de la gastronomía, tuvo un infarto al miocardio y le implicó un fuerte gasto en estudios y tratamientos. De ahí que lanzó la convocatoria para una rifa de una colección de Gerannios, como él les ha llamado a una serie de pinturas en las que usa frascos como lienzo.
Ahora, con el afán de seguir creando y seguir sanando, pero también de conseguir recursos para atención médica, ofrece su trabajo con los Gerannios. Son unas verdaderas bellezas que vale la pena tener en casa. Las temáticas pueden ser algunas historias ya conocidas, como El principito o Alicia en el país de las maravillas, o bien, un retrato familiar con un toque caricaturesco.
En entrevista para FDS, Genaro, también conocido como Geranio, comentó que la elaboración de estas pinturas comenzó cuando notó que algunos frascos tienen una forma que se asimila a la figura humana, además de que una persona cercana le contó acerca de las matrioshkas.
El artista, oriundo de Ciudad de México y quien vive desde hace varios años en Hidalgo, recordó que su primera obra fue una Frida con su huipil y el resplandor de tehuana. “Fue una pieza muy bonita. La hice pensando en llevarla a un café en Real del Monte y así como la vieron, la compraron. Lo que fue una buena señal”.
Aquella vez ya tenía el primer personaje de la serie de Alicia en el país de las maravillas: El Sombrerero Loco. “Cuando me encargaron toda la serie decidí tomarle fotografías. En este caso quería generar un producto más comercial y que para la gente fuera más fácil de ubicar”. Tardó poco más de un mes en completar la serie, que está compuesta por 10 piezas.
Para hacer los Gerannios, Genaro pule el vidrio de los frascos para que el material que se aplica antes de la pintura no se caiga. Así es que el vidrio queda poroso y retiene la pintura acrílica, pero el acabado final es como si se tratara de óleo.
La elaboración de una pieza puede llevar de tres días a una semana. La colección de Alicia, con 10 piezas, llevó más tiempo, por lo que tardó poco más de un mes.
Finalmente, Genaro expresó: “Creo de una manera profunda que el arte puede hacer la diferencia ante una sociedad tan complicada como la que vivimos. Es una manera de equilibrar incluso el universo de una persona”.
Para el artista es una pasión también hacer retratos, porque él lo considera como un archivo histórico que en una imagen puede decir mucho. “Es la muestra más humana de la relación entre el pintor y el retratado”.
Información:
Teléfono: 771 370 2003
Facebook: Genaro Hernández
Instagram: gerannio
Sara Elizondo I Pachuca
