Ayer se inauguró la exposición El ojo del minotauro, del fotógrafo Carlos Mercado, quien, a través de 96 piezas, comparte una parte del registro de la escena cultural, principalmente, en Pachuca. El objetivo de la muestra, que se ubica en la ciclopista del Río de las Avenidas, es crear un archivo formal y específico que dé cuenta de lo que ocurre en el arte y la cultura de Hidalgo.

En entrevista para FDS, dijo que la documentación con que cuenta tiene sus primeras referencias en 2013 y suma cerca de 800 obras de teatro, danza y performance.

“Es un resumen general e importante porque simboliza el trabajo en cuanto al tema documental. Ese es uno de los objetivos: crear y proteger un registro documental de la escena hidalguense.

“Que no se quede en un trabajo de redes o este mundo de contaminación visual, sino que tenga un valor y se le puede dar desde ahora con esta exposición, pues hay un acervo que se está creando y creciendo para que siga desarrollándose, ya que no hay un acervo que pueda dar argumentos y sea un respaldo de lo que se hace”.

“El valor es que este archivo sirva para documentar en un futuro y sirva como aporte para la cultura artística”.

¿Cómo surgió la necesidad de documentar la escena?

Carlos Mercado comentó que su acercamiento a la fotografía escénica ocurrió porque la vida lo fue acomodando donde debía estar. “Tuve la suerte de tener una cámara en la mano y me atrapó desde el inicio.

Fue una aventura para profundizar más en las técnicas y querer aprender al respecto.

“Al inicio era una búsqueda con la visión de reunir estas dos artes: el hecho escénico con la fotografía. Con el tiempo esa técnica fue tomando un estilo, sumando a ello la preparación. Al final se trataba de profesionalizar el quehacer escénico a través de la imagen fija.

“Un fotógrafo escénico sabe en qué momentos disparar; tiene que estar conectado con la escena e ir dos o tres pasos antes de que suceda un hecho importante, ya sea en un cierre o en momentos
de clímax”.

Es así como Carlos promueve la fotografía como un documento histórico, que juega un papel protagónico en el registro y desarrollo de la cultura. ¿Cómo surgió la necesidad de documentar la escena?
Es así como Carlos promueve la fotografía como un documento histórico, que juega un papel protagónico en el registro y desarrollo de la cultura.

El fotógrafo como artista

Por otra parte, Mercado cree en la necesidad de que se hable de la fotografía escénica como aportación artística. “La imagen es transmitir, preservar, cuidar y apreciar”.

“Dentro del trabajo, estoy viendo a otro artista a través de la cámara. Entro en el juego de entrar y salir de la escena, buscar los detalles que un espectador comúnmente no vería y a través de esa búsqueda, mostrar a la gente -que aunque estuvo ahí- que no lo notó.

“Desde el manejo y programación de una cámara, el conocimiento que aporta un fotógrafo es un artista mirando a otro artista. Cada uno aporta su sensible mirada a la escena. Es importante mostrar ese trabajo, porque sí hay. El hecho de poner su mirada y conocimientos es un proceso creativo y tiene un valor. Eso es lo que debemos comenzar a trabajar”.

Finalmente, Mercado considera que esta exposición es una iniciativa para empezar a hablar de la fotografía escénica: “Necesitamos abrir los espacios, las instituciones tienen que abrir el debate y espacios a partir de la fotografía escénica como un documento serio y de acervo histórico”.

Datos de la exposición:
El ojo del minotauro
De Carlos Mercado
26 de agosto al 2
de octubre
Ciclopista del Río de las Avenidas

Sara Elizondo I Pachuca

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