El duelo en Amsterdam se produce 13 meses después del último gran rival de jerarquía, que le clavó cuatro anotaciones al Tricolor.
El protagonismo del juego, tratando de no cometer los errores de aquel partido que fueron muy puntuales, se hicieron que el partido terminase como terminase; no vamos a renunciar en la búsqueda de ese protagonismo, lo buscamos desde el primer momento, tener la supremacía del juego, que el juego pase por nosotros, dispuestos a pasar los momentos de zozobra e incertidumbre porque enfrentamos un rival de jerarquía y no podemos pretender que todo el partido esté en el control de México”, mencionó el técnico Gerardo Martino.
Aquel 4-0 dejó la lección de no cometer errores puntuales en el traslado de la pelota, de acuerdo con las características del rival. La Albiceleste se dio un festín en los contragolpes.