La lluvia y el clima cálido ayudaron al crecimiento de las plantas de marihuana en el Parque Luis Pasteur, contiguo al Senado de la República.
A principios de año, varios colectivos instalaron un campamento para reclamar a los legisladores la regularización de la cannabis.
Los activistas fueron respaldados en varias etapas por los senadores morenistas Jesusa Rodríguez y José Narro.
“Se trata del primer plantío no clandestino de marihuana”, se ufanaban en alusión a la pequeña parcela que recibió las primeras semillas.
Varios meses después, las matas lucen en todo su esplendor, contrastante con la tardanza de los senadores para regular el consumo lúdico de la mota.
Mayolo López
Agencia Reforma
Julio Menchaca Salazar, presidente de la Comisión de Justicia de la cámara alta, aseveró que la ley para la regulación del cannabis, la cual fue aprobada en lo general el pasado miércoles, contribuirá para combatir los índices de violencia en México.
“Se dejaría de criminalizar a campesinos, pues muchas veces son obligados a sembrar marihuana de manera ilegal. El estado regularía las cadenas de producción y garantizar la calidad”, detalló en entrevista con Criterio.
La propuesta incluye una regulación con fines terapéuticos, científicos y lúdicos, así como realizar investigaciones en torno a esta planta, que desde hace 100 años es considerada prohibida en México.
El legislador hidalguense expresó que aún falta discutir cómo es el gramaje permitido para consumo personal y el número de plantas que se pueden cultivar, entre otras cuestiones.
Agregó que está ley debe estar lista antes que finalice abril, pues fue el término que les otorgó la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).