Por utilizar el celular mientras estaba conectado para cargarse, un niño de 11 años, de la provincia de Santarém, Brasil, murió al recibir una descarga eléctrica.
Según informes de medios locales, el niño, de nombre Matheus, se encontraba en el interior de su casa, junto a cuatro de sus primos, y no podía salir, ya que llovió durante 12 horas continuas.
Por la noche, una tormenta eléctrica azotó la zona en la que se encontraba, lo que afectó la corriente de decenas de hogares.