Durante la conferencia mañanera, Alfonso Durazo confirmó la masacre a la familia LeBarón, que dejó 9 muertos, entre ellos 6 menores, además de 6 menores lesionados.
La familia LeBarón está vinculada a una comunidad mormona que se estableció en el norte de México hace décadas. Ellos viven en la frontera con Arizona, en las sierras entre los estados de Chihuahua y Sonora, comunidad de doble nacionalidad americano-mexicana.
Los LeBarón fueron acogidos por México a finales del siglo XIX tras ser perseguidos en Estados Unidos por su tradiciones, en especial la poligamia.
Con el recrudecimiento de la violencia ligada al narcotráfico, estas comunidades se vieron afectadas y han sido amenazadas.
En 1955 fundaron la Iglesia del Primogénito de la Plenitud de los Tiempos, cuya principal sede se estableció en la colonia LeBarón.
De acuerdo con El Universal, el 7 de julio del 2009 el activista Benjamín Franklin LeBarón Ray encabezó un movimiento social contra el secuestro; por ello, fue asesinado en represalias por la captura de una banda de plagiarios a los que presuntamente denunció por el secuestro de su hermano Eric, a quien liberaron sin pago de rescate.
Con información de Clarín
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