Se habla mucho en diversos foros, artículos y redes sociales del tema de la economía circular y su importancia en la actualidad. Hace ya algunos meses en este mismo espacio comentábamos qué era la economía circular y la importancia que existe de reducir el consumo y reutilizar muchos de los productos que usamos. Cada día desperdiciamos más cosas o compramos productos que se ocupan una dos veces y se guardan o se tiran y en el mejor de los casos se regala para que otra persona las ocupe.
El uso de materias primas en los últimos 50 años se ha cuadruplicado. Hemos pasado de utilizar 28.6 billones de toneladas a 54.9 billones al año 2000 y actualmente pasamos a más de 100 billones. A este ritmo los recursos del planeta serán insuficientes para los próximos 50 años.
A lo anterior agréguenle que todo lo consumimos en una extensa mayoría, genera emisiones de carbono que impactan directamente en el medio ambiente y por ende en el calentamiento global.
Esta semana el Foro Económico Mundial publicó un artículo denominado 21 soluciones para la economía circular: cambiando la manera en que comemos, vivimos y viajamos para tener un mundo más sustentable.
En este artículo se habla de temas que todos podemos poner en práctica, en donde parte del principio que suficiente puede realmente ser suficiente. En materia de alimentos y nutrición se habla de que debemos de comenzar por evitar el consumo excesivo antes de atacar la problemática de la escasez de alimentos, se tiene que poner énfasis en productos sanos y saludables por encima de aquellos que no lo son y privilegiar las dietas a base de plantas y vegetales, ya que consumir proteína animal implica cada día gastar más agua y alimentos para producirla.
Otra solución que se propone radica en la necesidad de evitar desperdicios de alimentos y sobre todo de los empaques. En este sentido, cada día vemos más gente que usa empaques reutilizables y bolsas de tela para hacer sus compras. Incluso tiendas que venden todo a granel para no estar desperdiciando empaques.
Otra propuesta es el que no desechemos algo porque no sirve y probablemente si tiene reparación. Hace algunos años, el calzado traía tacones de goma que se desgastaban y podía ir uno con un reparador de calzado y cambiar ese tacón, no había necesidad de comprar unos nuevos zapatos. Hoy la gran mayoría del calzado viene con suela integrada al tacón en una sola pieza y si alguna parte se desgasta ya no sirve todo el zapato.
De ahí que se privilegien productos que puedan repararse. Otro claro ejemplo eran las licuadoras ¿A quién de ustedes no les toco ir a reparar la licuadora? Hoy se descompone y lo mas fácil es ir al supermercado y comprar otra.
En temas de viajes y traslados, las ciudades deberán privilegiar el uso de bicicletas y transportes ecológicos, en este sentido ya en nuestro país se está avanzando en el tema y cada día vemos a más gente trasladarse en bicicleta a través de ciclopistas diseñadas exprofeso para esto.
También se sugiere no cambiar de carro cada año, sino más bien la tendencia es conservar el auto que tienes y darle un adecuado mantenimiento para que dure muchos más años. En Europa, por ejemplo, se habla de que los autos particulares están estacionados sin usarse el 90 % del tiempo. Y no dudo que en nuestro país sucede lo mismo ya que nos transportamos a nuestro lugar de trabajo y ahí se queda todo el día estacionado y luego por la noche en el domicilio. De ahí, la necesidad de mejorar los sistemas de transporte público.
Para las empresas y gobiernos existen muchos retos para poner en práctica varias de las soluciones propuestas, pero lo más importante es cómo cada uno de nosotros podemos realmente contribuir a reducir el consumo y reutilizar más productos para evitar la sobrexplotación de nuestros recursos naturales.
Estamos viviendo tiempos difíciles, Covid, desabasto de productos a nivel mundial y ahora una guerra que impactará en la producción y distribución, entre otras cosas de granos en el mundo. La globalización que tanto hemos presumido en las últimas décadas esta pendiendo de un hilo muy frágil que afectará a muchos países, por ende hoy más que nunca hay que aplicar este tipo de soluciones y contribuir a una economía circular.
